Medalla del Capítulo y Diploma a la Hermandad de
Nuestro Padre Jesús del Gran Poder y María Santísima del Mayor Dolor y Traspaso
Sevilla. 3 y 4 de marzo de 2007.
El Gran Maestre y el Director de la Academia de la
Hispanidad, acompañados de un nutrido grupo de Damas y Caballeros, se
trasladaron a Sevilla para participar en una serie de actos durante los días 3
y 4 de marzo de 2007.
La jornada empezó en la tarde del sábado día 3, en el espléndido marco del Salón
del Almirante, suntuosa dependencia de los Reales Alcázares. La organización
del acto corrió a cargo del Ateneo Cultural y Solidario en colaboración con el
Excmo. Ayuntamiento de Sevilla. Presidieron el Vicealcalde Emilio Carrillo,
hombre de cultura, el Director de los Reales Alcázares Antonio Rodríguez
Galindo y la Presidenta de dicho Ateneo, Encarnación Navarro Martínez, Dama del
Capítulo. José María Gómez presentó y leyó versos de su poemario “El libro y la sombra” y en el mismo
acto se presentó también el libro Diálogos
entre Rocinante y Rucio Panza, de Jesús Sevilla Lozano, Director de la Academia
de la Hispanidad. En el transcurso del acto, finalizadas las lecturas, el Gran
Maestre fue nombrado Presidente de Honor del Ateneo Cultural y Solidario
sevillano.
En la mañana del día siguiente, domingo 4, el Gran Maestre y
el Director de la Academia fueron recibidos en el Santuario de Jesús del Gran
Poder donde asistieron a una Misa solemne, finalizada la cual hicieron entrega
de la Medalla del Capítulo y Diploma a la Hermandad de Nuestro Padre Jesús del
Gran Poder y María Santísima del Mayor Dolor y Traspaso. En todo momento les
acompañó la Dama sevillana Encarnación Navarro, organizadora también de este
acto, y el grupo incondicional de Caballeros y Damas del Capítulo que había
viajado con ellos hasta Sevilla. Al cerrar el acto, el Gran Maestre dedicó un
emotivo poema-plegaria al Señor del Gran Poder, versos que él mismo compuso
para la ocasión.
Así nos lo confiesa: “Leer
mis versos en los Reales Alcázares de Sevilla ha supuesto una emoción tan
profunda para mí y un honor tan alto que no lo olvidaré jamás”. Y añade: “Ser recibido en el Santuario de Jesús del
Gran Poder, y haber dedicado al Gran Señor de Sevilla y a su Santísima Madre
una Plegaria en verso, ha constituido el más alto privilegio que podía soñar. Y
todo ello para mayor gloria de la Reina Isabel”. Con estas expresiones nos
resume nuestro Gran Maestre la sucesión de experiencias vividas en esos dos
días sevillanos.
También la Hermandad de Santa Lucía recibió Medalla de Honor
y distinción de manos del Gran Maestre del Capítulo. En el santuario (Iglesia
de San Román, adornada con espléndidos azulejos del siglo XVIII) aguardaban el
Hermano Mayor y altos cargos de Santa Lucía, que se sintieron muy honrados con
la visita del Gran Maestre.
Éste en todo momento dejaba claro con sus repetidas palabras
cuáles son los fines del Capítulo que representa: la imitación de las virtudes
de Isabel la Católica, la defensa de la idea de Unidad de España y concepto de
Hispanidad que se desprende de su actuación histórica y la procuración de su
beatificación.
Plegaria
Santuario de Jesús del
Gran Poder. Sevilla.
Cuando en su trono contemplo
al Gran Poder sevillano,
con el pesado madero
sobre los hombros cargado
y en su rostro renegrido
ese rictus tan amargo,
me digo: “¡Señor, qué
grande
debió ser nuestro
pecado,
para que siendo Tú
Dios
quedaras tan
lastimado…!”.
Mas luego vuelvo a mirar
el rostro enjuto y las manos
y comprendo: “¡Gran
Poder,
Tú ya nos has
perdonado…!”
Y Tú, María Santísima
del corazón traspasado,
hoy tan excelsa y galana
en tu Santo Besamanos,
despliega tu bendición
a todos los sevillanos
y a cuantos hijos de España
con devoción te rezamos.
José María Gómez Gómez